Al terminar la carrera de Filología Alemana, Javier Rodríguez empezó su andadura profesional en contabilidad de proveedores en las oficinas centrales de Lidl España. Tres años después llegaría a la que ha sido su empresa los últimos 17 años: Nova Lanería, del grupo textil Torres Pradas, uno de los más importantes de España.
Charlamos con el director de Logística de Novalansa, sobre la situación actual y el futuro más inmediato del sector textil y el papel que juegan las empresas de transporte en el buen funcionamiento de sus procesos.
Pregunta: Desde su perspectiva, ¿qué huella han dejado estos dos últimos años en el sector textil?
Javier Rodríguez: Muy negativa. La pandemia ha provocado una grave crisis, sobre todo en sus inicios, ya que la gente no podía salir de casa y esto provocó una caída drástica de las prendas de vestir, además de desconfianza y miedo a consumir. Y, cuando parecía que llegaban signos de recuperación, desgraciadamente las subidas de precios de las materias primas y los fletes la han frenado.
P.: ¿Cómo afrontan el 2022?
J.R.: Con esperanza de que todo se acabe normalizando y que la gente recupere la confianza y las ganas de salir, para que puedan volver a comprar prendas de vestir. Es necesario que las empresas puedan comenzar a respirar, porque con la pandemia muchas de ellas solamente han podido sobrevivir (con suerte) y capear el temporal como han podido.
P.: ¿De dónde viene principalmente la competencia? ¿El escenario puede cambiar en un futuro próximo?
J.R.: La competencia principal es China, desde hace muchos años. No parece ser que esto vaya a cambiar en breve, pero sí es verdad que se nota un emerger de otros países como India y sobre todo Turquía. India todavía no es tan competitiva como China, especialmente en calidad, pero Turquía sí y tiene la ventaja añadida de la cercanía a Europa con respecto a China y lo que eso significa en ahorro de costes y tiempo de transporte, algo muy importante actualmente porque las subidas de precio de los fletes están siendo insoportables para las importaciones desde China.
P.: Si por el momento no podemos competir con China en cuanto a producción, aunque sea hablando de forma general, ¿dónde pueden encontrar las empresas nacionales las mejores oportunidades para posicionarse en el sector? ¿Cuál es nuestro valor añadido?
J.R.: Está claro que nuestro valor añadido ha sido siempre la calidad, el diseño y la innovación. Los tejidos fabricados en España son de la mejor calidad, a diferencia con los tejidos fabricados en China, que a veces dejan mucho que desear a ese respecto.
Por otra parte, las diferencias de coste entre los tejidos fabricados en China y España cada vez son menores debido a los incrementos de los fletes, además del problema que supone no encontrar contenedores disponibles para los envíos desde Asia y los retrasos que ello conlleva. Si estos precios desorbitados de transporte continúan, yo creo que sería muy conveniente plantearse el reindustrializar el país (en el sector textil y también en muchos otros sectores) para no depender tanto de la producción asiática en cuanto a disponibilidad y plazos de entrega.
P.: Olvidémonos del COVID y la pandemia y miremos un poco más allá, ¿cuáles son los principales retos del sector textil nacional a corto plazo?
J.R.: Yo pienso que es vital no perder músculo industrial y fuerza laboral. Si se cierran fábricas y no se fomenta la formación profesional en el sector textil (ya nadie quiere estudiar para teórico textil o para controlar un telar), se perderá capacidad de producción y margen de maniobra. Creo que a veces es preferible sacrificar un poco el margen comercial para tener una mejor disponibilidad y maniobrabilidad, para seguir contando con la confianza de tus clientes, porque cada vez es más insostenible que hagas un pedido a China y te tarde tres meses en llegar la mercancía.
P.: Por último, según su experiencia, ¿qué papel juega el transporte de mercancías en el buen funcionamiento de una empresa como Novalansa?
J.R.: Es básico contar con buenos colaboradores logísticos, como en nuestro caso MBE Airport entre otros. Hoy en día la competencia es feroz y en concreto en mi departamento (exportación) no sólo competimos con empresas españolas sino de todo el mundo. Por esto es vital contar con un buen servicio de transporte, porque servir rápido para llegar antes que la competencia es imprescindible. El servicio y la calidad son detalles que marcan la diferencia ya que, hoy en día, los precios de los artículos básicos son muy similares en todo el mundo. |